Foto: Granma

La Coalición Agrícola de los Estados Unidos para Cuba (USACC, en inglés), solicitó al recién electo presidente Joe Biden el regreso a las políticas de apoyo al desarrollo de relaciones beneficiosas entre el sector agrícola de ambos países.

La petición enviada refiere que las sanciones dañan al pueblo cubano y que su levantamiento, puede contribuir a importantes beneficios económicos y humanitarios.

En la carta se propone también que agricultores, empresas, organizaciones privadas, ONG y las universidades de Estados Unidos trabajen con contrapartes cubanas sobre los desafíos de aumentar la productividad, adaptarse al cambio climático y construir estrategias comerciales sólidas.

También resalta las posibilidades con que cuenta el sector privado en Cuba para importar y exportar, así como la invitación que ofrece la Isla a la inversión extranjera en cooperativas agrícolas privadas, lo que representa una oportunidad para que los estadounidenses ayuden en el crecimiento de ese sector.

El documento insta además, al presidente Biden a un esfuerzo por la normalización de las relaciones bilaterales y la eliminación del bloqueo en su totalidad.

La Coalición Agrícola, solicita igualmente tomar medidas tempranas para restaurar las Regulaciones de Control de Activos de Cuba (vigentes el 20 de enero de 2017) y suspender el Título III de la Ley Helms-Burton, pasos regulatorios importantes para la agricultura de los Estados Unidos y las empresas en general.

La Coalición Agrícola Estadounidense para Cuba fue constituida en enero de 2015, con el objetivo de fomentar el desarrollo del comercio agrícola entre ambos países.

El bloqueo a causado significativas pérdidas a la Agricultura cubana

Desde Estados Unidos se recibieron opiniones de los congresistas estadounidenses que visitaron nuestro país en 2017 (Ralph Abraham, James Comer, Roger Marshall y Rick Crawford), quienes propusieron un Proyecto de Ley para permitir a sus agricultores el comercio con Cuba.

En más de 19 millones de dólares calcula Cuba las pérdidas causadas por el genocida bloqueo económico comercial y financiero impuesto por Estados Unidos al sector agrícola en sólo un año, según divulgó Maury Hechavarría Bermúdez, viceministro del Ministerio de la Agricultura.

En un encuentro virtual organizado por el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), el funcionario señaló que las leyes de esa injusta política injerencista privan a los productores cubanos de acceder al mercado y a las tecnologías estadounidenses para garantizar sus cosechas, limitándolos en la compra de insumos, fertilizantes, plaguicidas, equipos de riego, maquinarias y otros equipamientos necesarios.

Con la administración de Donald Trump «el recrudecimiento del bloqueo ha impactado en todo el sistema de la agricultura, en especial en el empresarial, las cooperativas agropecuarias y en los productores. Por consiguiente, ha ocasionado afectaciones en la producción de alimentos para la población», señaló el funcionario, quien añadió que esas medidas coercitivas impiden el cumplimiento de las metas y objetivos del desarrollo sostenible, particularmente la referida al «Hambre cero».

Gabriela González García, especialista de la dirección de análisis y asuntos legales de EE.UU. en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, hizo referencia a la madeja de leyes que componen el bloqueo y explicó que, si bien nuestro gobierno desde el año 2000, por acuerdos bilaterales, compra alimentos en esa nación norteña, lo debe hacer mediante el pago en efectivo, por adelantado y utilizando bancos de terceros países.

Ella lo calificó de un «proceso lleno de dificultades» ya que el proceso de compra debe completarse antes de que los productos se envíen a Cuba: «Nuestro país debe identificar instituciones financieras en terceros países que estén dispuestas a efectuar los pagos que de por sí son montos muy altos porque se nos prohíbe realizarlos a plazos y sin posibilidad de acceder a créditos», puntualizó.

Todo ello se ilustró con testimonios de productores agrícolas de la finca Jibacoa, del municipio capitalino de Boyeros y de la cooperativa agropecuaria Amistad Cuba-México, en Alquízar, provincia de Artemisa.
También intervino Deno DiSantis, miembro de la organización Matanzas- Sister Cities de Pensilvania, y se pronunció en contra de la prohibición de comerciar con Cuba: «si no hubiera sido por el bloqueo a Cuba muchos de nuestros agricultores estarían mejor con la apertura de un mercado al que no tienen acceso ahora».

Además, en el evento se divulgó la carta dirigida al presidente electo, Joe Biden, por la Coalición Agrícola Estadounidense para Cuba.

Por el ICAP, intervino Sandra Ramírez, directora de Norteamérica de esa institución. Ella hizo referencia a que este tipo de actividad virtual se organiza cada mes alrededor del día 17 para generar una conciencia en contra del bloqueo que desde la Casa Blanca se impone a Cuba.

(Con información de Cubadebate y Granma)

Ver además: 

Denuncian en cita virtual internacional efectos del bloqueo de EE.UU. contra Cuba

Vicepresidenta de Venezuela presenta Ley Antibloqueo en su visita a Cuba