Con efecto en la economía y las personas, el país ajusta pormenores para el día 0 porque “no hay modo de avanzar en las transformaciones que requiere la economía sin ordenarlo todo, y por eso se llama ordenamiento monetario”, al decir de Marino Murillo Jorge, jefe de la Comisión de Implementación de los Lineamientos. La llamada también Tarea Ordenamiento “incluye cuatro elementos bien claros: resolver la dualidad monetaria, resolver la dualidad cambiaria, eliminar subsidios y gratuidades hasta donde sea posible en las condiciones de nuestra economía y hacer una transformación de los ingresos”, explicó Murillo al brindar por primera vez información pública acerca del trascendental tópico, que ha generado rumores, estampidas hacia los bancos e innumerables temores.
La fecha, el día 1ro. de un mes, será dada a conocer por el Banco Central de Cuba y a partir de ahí tendrá lugar la transformación de salarios, pensiones y asistencia social. Aunque dejará de emitirse el cuc, circulará el que está en manos de la población por un período de unos seis meses, para cambiarlo o gastarlo, y se respetará el tipo de cambio vigente antes de la medida, a la vez que se aplicará la nueva tasa de cambio. El contexto económico cubano es complejo y, los cambios, inaplazables. Vivimos con distorsiones económicas como carencias salariales acumuladas; deficiencias en el sistema empresarial motivadas por restricciones administrativas que durante años han generado ineficiencia; problemas de incentivos a los exportadores; desequilibrios macroeconómicos y déficits fiscales debido al alto nivel de transferencia del presupuesto del Estado al sistema empresarial, precisó.
Con múltiples ejemplos, Murillo Jorge abordó el desestímulo que constituye la dualidad monetaria para las entidades exportadoras y productoras; cómo, en contradicción, resulta económicamente más beneficioso importar o adquirir materias primas de importación que otras obtenidas en el territorio nacional. La complejidad de este escenario, destacó, obliga a trabajarlo con mucho cuidado y rigor y, alertó: como otros procesos económicos y sociales tan grandes, este no está exento de riesgos.
VARIOS POLLOS PARA UN ARROZ
Según se reiteró, el ordenamiento no es mágico, pero se espera favorezca el desempeño de la economía y, por tanto, la elevación de la calidad de vida y la motivación e interés por el trabajo como fuente fundamental de ingresos. Para llegar a las actuales propuestas, expuso Murillo, se evaluaron los impactos en todos los ámbitos como parte de un proceso que tuvo una amplia participación de especialistas, funcionarios, académicos y directivos, con miradas y criterios diversos y que contempló también el análisis de experiencias internacionales a partir de intercambios con expertos extranjeros de diferentes países e instituciones.
“No podemos seguir avanzando en las transformaciones de la economía si no tomamos decisiones sobre estos temas, con las complejidades que tienen y los efectos que pudieran tener en la población”, reiteró. Unificar los tipos de cambios implicará una devaluación del peso cubano, con la consiguiente elevación de los precios, lo que requerirá también de un incremento salarial. Para garantizar la integralidad requerida en el ordenamiento monetario, avanzarán al unísono la unificación monetaria, la unificación cambiaria, la transformación del sistema de subsidios y gratuidades y de los ingresos de la población: salarios, pensiones y prestaciones de la asistencia social. Al cortarle el aire a la dualidad, que pone en jaque a las empresas estatales, sobre todo a las exportadoras, se abrirían los caminos hacia la inaplazable eficiencia y, solo en un primer momento, quienes acumulen pérdidas, tendrán un amparo del Estado para su protección. A diferencia de otras naciones, “la solución para nosotros con la Tarea Ordenamiento, aun cuando un grupo de empresas tiene serios problemas de eficiencia, no es tirar a las calles a 250 000 o 300 000 personas. El desempleo para nosotros no es una opción”.
Como serpiente que se muerde la cola, la dualidad cambiaria y monetaria está estrechamente ligada a los subsidios excesivos y gratuidades indebidas. “Subsidiar a una familia de bajos ingresos es parte de la humanidad de nuestro modelo socialista. Y todas las gratuidades no son malas: la salud, la educación y todas las conquistas de la Revolución.
El problema es cuando esto tiene un carácter masivo que no estimula la productividad del trabajo”, insistió. Murillo aclaró que se mantendrán algunos productos con precios centralizados y también subsidiados en la canasta familiar normada. Otros tendrán costos únicos, pero sin subsidios, y permanecerán dentro de la libreta de abastecimiento para garantizar que lleguen a todas las personas. A juicio del vice primer ministro, Alejandro Gil, el ordenamiento monetario generará importantes beneficios para todos.
A su vez, destacó: “Quienes trabajamos con el Estado vamos a agradecer el aumento salarial y que el trabajo sea la principal fuente de ingresos. Va a ser difícil vivir sin trabajar, pero en medio de ese contexto, daremos todo el apoyo a las personas vulnerables y no aptas para hacerlo”. En un programa anterior de la Mesa Redonda, Gil había señalado: “La transformación profunda del modelo económico con la Tarea Ordenamiento, crea condiciones mucho más favorables para el impulso económico nacional y una condición social también mucho más favorable para nuestro pueblo”.
En ese momento, el también Ministro de Economía y Planificación anunció transformaciones en otros ámbitos: el trabajo por cuenta propia, nuevas regulaciones para la contratación de fuerza de trabajo en el campo, la creación de un banco de fomento agrícola, reestructuración en el sistema de comercialización e incentivos fiscales a las minindustrias, dirigidas a dar condiciones para elevar la producción de alimentos. “La estrategia no es un listado de tareas o medidas a implementar, por el contrario, contiene un conjunto de transformaciones profundas en la economía. Es una estrategia innovadora, buscando siempre los elementos que nos permitan avanzar en las condiciones actuales, sin que haya retrocesos”, puntualizó Gil.
Cuando todavía la COVID-19 es un peligro latente y demanda de la responsabilidad personal, familiar, colectiva e institucional, para lo cual el país adopta cada día nuevas medidas de enfrentamiento y control, Gil sostuvo que “se trabaja para sobreponernos al contexto actual, que requiere de mucha unidad y comprensión de nuestro pueblo sobre cómo salir adelante, no dejamos de pensar en nuestro modelo de desarrollo, en su sostenibilidad y en las transformaciones que tenemos que incorporar para alcanzar ese socialismo próspero que los cubanos hemos decidido como modelo”.
De acuerdo con que se resuelva ya, más me preocupa mucho, muchísimo los precios"topados" de productos del agro. Al paso que van seguirán acumulándose las "carencias salariales". No bastará reforma ni nada mientras en lugar de topar no se regule y controle el.margen comercial. No es posible que hoy el machito minúsculo de zanahoria cueste 20cup, Cuando ni 5cup merece!¡! Sólo 1ej, hay miles!¡ lo sensible es q se trata de acceso a la alimentación sana y balanceada. Con dolor y optimismo, prefiero vivir para ver.
Y cuándo será ese primer dia del mes, todos estamos locos por esa sorpresa
Puede haber dualidad monetaria eso a mi consideración es algo que el pais necesita, ahora bien quien le pone freno a los precios que acaban con el bolsillo del que mas dinero tenga y me refiero aqui en la havana la venta de aji cachucha esos precios son desorbitantes eso es un abuso por 4 o 5 aji te piden 10 pesos eso no veo a nadie que controle esa barvaridad
Muy ingenioso ha sido la estrategia adoptada , tengo fe en que saldremos adelante y nuestros profesionales y trabajadores en general se sentiran mas protegidos y estaran mas orgullosos de vivir en esta patria de fidel y de tantos que dieron su vida por la soberania cubana.