La situación epidemiológica que presenta la capital es analizada en cada reunión del Consejo de Defensa Provincial (CDP). En estos momentos, en todos los municipios hay presencia de casos positivos a la COVID-19 y continúan siendo Plaza de la Revolución, Cerro y Playa los territorios de mayor riesgo epidemiológico en la ciudad.

De acuerdo a la doctora Yadira Olivera Nodarse, subdirectora provincial de Salud y directora del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, existen ocho municipios por encima de la media provincial: Playa, Plaza de la Revolución, Regla, La Habana Vieja, La Habana del Este, Cerro y Cotorro. De ahí que las acciones fundamentales están asociadas a incrementar el aislamiento social, la vigilancia epidemiológica a contactos de casos sospechosos, las medidas de protección y la desinfección en las instituciones de Salud, procederes fundamentales, al decir de Luis Antonio Torres Iríbar, Presidente del CDP de La Habana.

Ante el comportamiento de la pandemia en la capital, resultó necesario decretar el aislamiento social reforzado en el consejo popular El Carmelo, del municipio de Plaza de la Revolución y en cuatro manzanas del municipio de Cerro, comprendidas entre las calles Buenos Aires, Agua Dulce, Diana, Carvajal, Serafines, Alejandro Ramírez y Flores (se intensificaron las acciones, además, en las 11 manzanas circundantes). De igual forma, se actuó en el consejo popular Lotería, del Cotorro, comunidad donde se reporta el mayor número de contagiados por cubanos que llegaron del exterior y contacto con casos positivos a la COVID 19.

En estos lugares se incrementaron las acciones de Salud, de saneamiento, comercio, mercados agropecuarios estatales y trabajo. El Vicepresidente del Consejo de Defensa Provincial, Reinaldo García Zapata, puntualizó que las principales actividades de refuerzo al trabajo higiénico-epidemiológico se realizarán en los municipios Plaza de la Revolución, Playa, Cotorro, Cerro y La Habana del Este que son los de mayor complejidad con casos de la enfermedad. En este sentido, García Zapata convocó a aumentar las medidas que refuercen el autodistanciamiento para evitar la presencia de personas en las calles, excepto por circunstancias relacionadas con el autoabastecimiento de productos alimenticios y de aseo.

Aún se observa una significativa afluencia de ciudadanos en importantes arterias de la urbe, siendo Cerro, Playa y Plaza de la Revolución los municipios con más incidencia de una situación –recalcó– que debe reducirse al mínimo. Subrayó que la suspensión del funcionamiento del transporte público favorece limitar algunas actividades esenciales que provocan movilidad de la población fuera de su área de residencia. De igual manera, se refuerza la pesquisa activa por el personal médico para la detección, aislamiento y tratamiento oportuno de las infecciones respiratorias agudas (IRA), con intencionalidad en las zonas (manzanas) de riesgo identificadas a partir de los casos confirmados. Se implementará un seguimiento estricto del ingreso domiciliario a las IRA, en evolución, de 14 días.

Trascendió que la provincia dispone de 27 centros de aislamiento epidemiológico; mientras, se ha previsto la adecuación de otras instituciones para alojar a médicos, enfermeras y técnicos de otras provincias que reforzarán la terapia intensiva en hospitales capitalinos. Se tiene en cuenta, además, la preparación de instalaciones de aislamiento en función de situaciones de emergencia, en los casos de personas que arriben al país por vías ilegales desde naciones localizadas en nuestra área geográfica. Como parte de las nuevas regulaciones a favor del orden y la preservación de la vida, se decidió aprobar la presencia de una representación de la Fiscalía de La Habana en cada unidad policial para la aplicación de medidas punitivas a quienes violen lo establecido (como el uso del nasobuco), consuman bebidas alcohólicas en la vía pública y otras indisciplinas que contribuyen a la transmisión de la COVID-19.

Con respecto al abastecimiento de agua, en la capital, los indicadores se muestran inferiores al plan debido a bajas presiones en las cuencas de abastecimiento, roturas, salideros en las calles, lo cual obliga a sostener alternativas como el uso de pipas, a la par del montaje de bombas de agua para garantizar que llegue a los pisos más altos, como en el caso de la Villa Panamericana. Torres Iríbar señaló que nos golpea la sequía y los problemas naturales, pero no se puede demorar la solución de las roturas.

El Presidente del CDP convocó, una vez más, a examinar el cumplimiento de las medidas en la fase actual, de transmisión autóctona limitada, y la preparación de las medidas para la cuarentena. Enfatizó en la necesidad de que la población comprenda sobre la urgencia del aislamiento social y aseveró: “Tenemos que elevar el rigor y buscar el orden; no hay aislamiento social sin orden ni disciplina”. Detener el avance de la COVID-19 en La Habana es el principal derrotero del Consejo de Defensa Provincial, donde diariamente centran los análisis en: producción de alimentos, vitalidad de servicios básicos y la disciplina, tanto de organismos e instituciones, como de la ciudadanía.

“Los aplausos de cada noche reafirman la unidad del pueblo con su Revolución. Muchas personas han cambiado su proyección acerca del significado de la salud como conquista de este país, que demuestra su capacidad de respuesta a una pandemia que pone al descubierto las insuficiencias de las naciones capitalistas con sus políticas neoliberales, manifestó Iríbar y añadió: “Nuestra cuota y libreta de abastecimiento la pueden criticar, pero nos garantiza la distribución de alimentos que pueden llegar a muchos. Debemos garantizar el control sobre la producción, distribución y comercialización de productos, en medio de la necesidad de multiplicar nuestras potencialidades bajo el efecto del genocida bloqueo del gobierno de los Estados Unidos contra Cuba. Tenemos la responsabilidad de preservar la salud del pueblo”, concluyó