Con exposiciones de resultados de investigaciones relevantes para la agricultura cubana, el Grupo Agrícola (GAG) celebró el Día de la Ciencia Cubana en el Instituto de Investigaciones Fundamentales en Agricultura Tropical Alejandro de Humboldt (Inifat).

El encuentro contó con la participación de Telce Abdel González Morera, director de Ciencia, Técnica, Innovación y Medio Ambiente del Ministerio de la Agricultura; el director de la Agencia Italiana de Cooperación  para el Desarrollo (AISC), Antonio Festa; y del presidente del GAG, Orlando Linares Morell, así como directores e investigadores de diferentes centros de investigación del GAG, sobre el cual se brindó una información general.

Entre los resultados expuestos estuvo el trabajo desarrollado por el Instituto de Investigaciones en Fruticultura Tropical acerca de la distribución filogeográfica de Phillosticta citricarpa a nivel mundial, mediante la secuenciación del genoma.

Según se explicó, los resultados tienen un gran impacto en la agricultura y puede utilizarse para perfeccionar la legislación fitosanitaria y los programas de manejo de la enfermedad. Todo esto favorece la producción citrícola, la seguridad alimentaria, la sustitución de importaciones y mayores ganancias como rubros exportables.

Foto: Raquel Sierra

El Instituto de Investigaciones Liliana Dmitrova compartió la salida de un estudio sobre el manejo de cultivares de garbanzo (Cicer arietinum L.) mediante la biofertilización y la reducción del fertilizante mineral. Entre los resultados se encuentran el incremento de los rendimientos del cultivo, la reducción del uso de fertilizante y la disminución de los costos de producción, lo que sienta las bases para mejorar el trabajo con cultivares mediante el uso de microorganismos para responder a las condiciones actuales del clima cubano.

Otros resultados estuvieron relacionados con la producción de condimentoa, para contribuir al fortalecimiento de esa cadena de valor de las plantas aromáticas y los condimentos frescos y secos, así como con el cultivo de diferentes variedades de maíz, a cargo del Instituto de Investigaciones de Granos, en un contexto de disminución de la producción y los rendimientos y un alza de precio en el mercado internacional.

En el encuentro se hizo reconoció a investigadores destacados de los centros de asociados al GAG, así como al Inifat, al Instituto de Fruticultura Tropical, el Instituto de Investigaciones de Granos y al Instituto Liliana Dmitrova.

González Morera recordó como desde fecha tan temprana como en 1960 el Comandante en Jefe pronunció la frase que dio origen al Día de la Ciencia, lo que significa que la Revolución cubana era y es profundamente científica.

A su vez, consideró un privilegio para el Ministerio de la Agricultura contar con una entidad como el Inifat, que en abril venidero cumplirá 120 años. “No hay una institución de ciencias agrarias en el país cuyos orígenes no estén aquí. No hay un cultivo en el país que su origen en la investigación no sean aquí y es la primera institución de habla hispana de toda Latinoamérica de ciencias agrarias”.

Al respecto, consideró que eso debe servir de regocijo, “pero también de reflexión, de profundizar y de mirar al futuro, pensando en las bases que están muy bien construidas en esta institución” y enumeró las acciones del ministerio relacionadas con la ciencia, entre ellas, la creación del Comité de Innovación, la consolidación de su Consejo Técnico Asesor y creación del Comité de Ciencia.

Foto: Raquel Sierra

Según dijo, 2024 tiene que ser un año también con grandes retos, dos de los cuales calificó de muy importantes: el sistema de ciencia tiene que acabar de ver al productor como el actor económico principal del entorno agrario y también como un actor al que hay que ir a escuchar, aprender y tomar experiencias y contribuir y acompañar con lo que nosotros hacemos.

A su juicio, tiene que ser un año también en el que se ponga la innovación en el papel que va, pues a veces asusta que se ponga delante de ciencia. “El proceso de innovación también lleva una profunda actividad científica, una profunda actividad de investigación y tenemos que acabar de trabajar por verdaderos sistemas de innovación muy bien articulado”.

El director de Ciencia, Técnica, Innovación y Medio Ambiente del Ministerio de la Agricultura deseó un año próspero para la ciencia en Cuba, que logre un mayor acompañamiento en los programas productivos y un mayor impacto para la alimentación de la población.

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