Los hermanos Almaguer, con siete y nueve años de edad, ya dan los primeros pasos en un mundo tan complejo y fascinante como el de la robótica. Ello ha sido posible gracias al Proyecto Inforobotizando, el cual ha permitido el acercamiento de niños de diferentes edades a esta actividad.
A esos pequeños (Daniel con siete años, y Diego, nueve), los conocimos este 20 de agosto, en el Joven Club de Computación Arroyo 1, en el municipio de Arroyo Naranjo. Ese día tuvo lugar allí una actividad en homenaje al 96 cumpleaños del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro Ruz, con la característica de hacerlo desde la robótica.
Y no podía ser de otra forma, ya que Fidel, el 15 de enero de 1960, en fecha en que la Revolución apenas daba sus primeros pasos, afirmó en acto realizado en la Academia de Ciencias, que "El futuro de nuestra Patria tiene que ser, necesariamente, un futuro de hombres de ciencia, un futuro de hombres de pensamiento". ¿Qué otra cosa sino futuros hombres y mujeres de pensamiento se fomentan en los Joven Club de Computación?

Lograr que los niños se interesen desde edades tempranas en la computación y la robótica permitirá ensanchar el horizonte de quienes, en un futuro cercano, habrán de llevar sobres sus hombros el desarrollo científico del país. Sin embargo, en el Proyecto inforobotizando, este 20 de agosto, no solo conocimos a los hermanos Almaguer, junto a ellos se encontraba Yoel, un inquieto niño de cinco años que es el más pequeño de todos los que toman parte en el taller de verano del mes de agosto del Joven Club Arroyo 1.
Otros dos integrantes, estudiantes muy especiales también acudieron a la cita, se trata de Dunia Hernández Forcade, de 38 años, y Sandy Palacio Portuondo, de 30, dos muchachos con necesidades especiales provenientes del Centro Psicopedagógico La Castellana.
Para conocer más acerca de esta singular experiencia conversamos con la máster en Ciencias Higinia Mayeta Padrón, quien funge como especialista de robótica del proyecto Inforobotizando, el cual tiene alcance provincial y es el único de su tipo en la capital. Sobre su surgimiento nos comentó que los niños llegaron a los talleres de verano a partir de la divulgación, promoción y actividades de extensión que se desarrollaron, fundamentalmente, en las escuelas primarias del territorio.
"Esta, dijo, es la primera experiencia con niños tan pequeños que se tiene con respecto a la programación en bloque y los resultados han sido muy importantes, toda vez que han sido capaces de programar, por sí mismos, a partir de planteamientos de situaciones específicas, resolviendo los problemas planteados".
Nos explica la máster en Ciencias que no es común que accedan a este tipo de talleres niños tan pequeños, y se hace teniendo un precedente referido a la programación en bloque y el conocimiento preliminar de qué es un algoritmo y cómo funciona. En este caso, ellos asistieron al taller con una experiencia mínima, adquirida mediante la divulgación de estos talleres, y una especie de introducción a la programación que formó parte de los encuentros uno y dos de los talleres de verano.
LA CASTELLANA, PRESENTE

Acerca de la presencia de los dos miembros de La Castellana, Mayeta Padrón explicó que han querido hacer de Inforobotizando un proyecto inclusivo, "donde podemos incorporar a personas con distintos tipos de discapacidades, incluidas las intelectuales".
"Los resultados obtenidos con Dunia y Sandy son extraordinarios. Hemos logrado que se familiaricen con el entorno de la programación en bloque, que sean capaces de reconocer qué es y cómo funciona, y realizar de forma independiente proyectos muy sencillos".
"Una de las ventajas de la robótica informática, y que hemos podido ver en Dunia y Sandy, es el desarrollo de habilidades creativas y de trabajo en equipo, integrando el conocimiento individual, de forma que ha fluido el intercambio entre ellos, y su creatividad en ese preciso intercambio".

Más allá de cuánto nos comentó Mayeta Padrón, acerca del desarrollo de las habilidades de estos estudiantes, está lo que pudimos apreciar en el encuentro. Allí tanto los niños, como Dunia y Sandy, fueron capaces de responder diferentes preguntas, y realizar distintas actividades con un pequeño robot.
Sin dudas, el futuro de nuestra Patria es, desde hace mucho, un presente de hombres y mujeres de ciencias. De personas que, desde los más diversos campos, ponen todo su saber para el desarrollo del país, y el bienestar de su pueblo. Un futuro que crece en estos pequeños que hoy comienzan a ensanchar sus mentes gracias a este primer acercamiento a la robótica.
Ver además:
En la capital cubana: Escuela de Verano de Modelación Matemática