El boletín del Club Británico de Ornitología publicó un catálogo actualizado de las 36 especies de aves identificadas en los restos fósiles extraídos de yacimientos paleontológicos cubanos, anunció LA Red Cubana de la Ciencia.
Los residuos datan de los períodos del Pleistoceno superior y Holoceno e incluyen un catastro de las localidades fosilíferas, y en su mayoría se encuentran en cavernas, aunque se distingue uno en Martí, en la provincia de Matanzas, el cual representa una antigua laguna de asfalto, de acuerdo con la fuente.
Según William Suárez, autor del estudio, entre estas aves predominaban las de presa y carroñeras (72%), aunque también han aparecido especies que habitaron en lagunas y bosques que se alimentaron de los recursos del medio.
Gran parte de tales sedimentos están atesorados en las colecciones del Museo Nacional de Historia Natural, al igual que en otros y colecciones privadas.
Biota cuaternaria: develando el pasado es el título de una exposición que continúa abierta al público durante siete meses en el Museo de Historia Natural, una de las instalaciones de la Oficina del Historiador de la Ciudad, en el municipio capitalino de La Habana Vieja.
La muestra la inauguraron el 18 de enero pasado y se extenderá hasta el mismo día de julio entrante, relacionada con el ecosistema de la era geológica que sigue a la terciaria y es la última en que se divide la historia geológica de la Tierra, extendida desde hace unos dos millones de años hasta la actualidad.
Especialistas de la institución informaron a la Agencia Cubana de Noticias que contiene fotografías, mapas, modelos, dibujos, diseños y textos sobre tal período, bajo la asesoría científica del Doctor en Ciencias Manuel Iturralde Vinent, miembro de la Academia de Ciencias de Cuba.
Señalaron que en sus colecciones figura la Cueva del Abrón de Caiguanabo, en la Sierra del Rosario, cordillera de Guaniguanico, provincia de Pinar del Río, y constituida por rocas calizas de edad Cretácico, el tercero y último de la era mesozoica o secundaria y que sigue al período jurásico.
Un dato curioso es que su fauna está compuesta por murciélagos, reptiles, anuros e insectos y tiene acceso por carretera de San Andrés, Entronque de Herradura, donde radicó un campamento de cimarrones a principios del siglo XIX.
Además, sobre las investigaciones en la localidad paleontológica Breas de San Felipe, uno de los sitios de mayor riqueza paleontológica de Cuba, con representantes fósiles bien preservadas, que permiten conocer la biodiversidad de la vida en las zonas costeras del Pleistoceno superior a Holoceno temprano de Cuba.
Están situadas en un terreno rodeado de colinas de poca altura, a pocos kilómetros de la costa norte de Matanzas, donde se encuentra la ciénaga de Majaguillar.
Los materiales para la expo Biota cuaternaria: develando el pasado, estuvieron a cargo de profesionales del Instituto de Paleontología de Moscú y del Centro de Investigaciones del Petróleo, de la Unión Cuba-Petróleo (CUPET).
(Tomado de ACN)
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Una vez conseguida la curiosidad, ¿Nos quedamos a la espera de la relación de nombres de cada una de esas 36 aves?. Algunas identificadas en la postal publicada, otras no. Gracias.
Mi agradecimiento como cubano a esta gran labor desarrollada por los científicos que nos permite conocer las diferentes especies que habitaron nuestro archipiélago en edades geológicas tan tempranas, gracias