El 16 de noviembre une a los habaneros –y cubanos todos- en torno al onomástico de la gran urbe, en su condición de casa común -de “nacidos” y “aplatanados”-, y capital de todos; y asimismo a esta con la comunidad Camilo Cienfuegos, que se ubica al este y abrazada al mar, también se ciñe a ella en la fecha que les marca el cumple. La ciudad madre acaba de sumar 502 añitos, 60 su retoño.

Y precisamente por El Camilo inició el intenso periplo de las máximas autoridades, del Partido y el Gobierno, del territorio, quienes, al calor de los festejos, quisieron fundirse y cruzar opiniones con los cumpleañeros, de aquí y acullá; pegar más el oído a donde la vida late sin barnices, tomar pulso al influjo transformador que reina en la provincia, y por supuesto, compartir el jubileo, ser partícipes de los regalos que los habaneros le hacen a los habaneros.

La visita al lugar tuvo como punto de partida la llamada rotonda de Pastorita, frente al busto de Martí, y en cuyas tierras fueron esparcidas las cenizas, de quien fuera alma en la materialización del proyecto que diera vida al residencial reparto, el primero edificado por la Revolución, en armoniosa combinación hombre-naturaleza, lograda con edificios e instalaciones sociales de exquisito diseño arquitectónico y áreas verdes y espacios abiertos, estratégicamente ubicados, lo cual le valió para merecer la condición de Patrimonio Nacional.

Luis Antonio Torres Iríbar y Reinaldo García Zapata, primer secretario del Comité Provincial del Partido y Gobernador de La Habana, respectivamente, llegaron hasta la Clínica Estomatológica, presta a ofrecer servicios luego de una reparación capital, que devolviera e incluso sumara prestancia y funcionabilidad, a todas sus consultas (para niños de círculos infantiles y de edades preescolares, estudiantes de primero a sexto grado, para los jóvenes de adolescentes y preuniversitarios, adultos e incluso una dedicada a la atención psicológica), y también al resto de las dependencias (rayos x, esterilización, prótesis, ortodoncia, higiene bucal…).


Torres Iríbar y García Zapata caminaron y conversaron con vecinos, delegados, y hasta los niños de las escuelas, siempre prestos a hacerles saber la alegría que les invade por las transformaciones que experimenta el barrio.

“No venimos a inaugurar. Estamos aquí para escuchar y saber cómo marchan las cosas”, hizo saber Torres Iríbar, quien, en cada uno de los intercambios suscitados, prácticamente a cada paso, hizo saber que la lista de barrios habaneros, que dada su condición de desfavorecidos, experimentan profundas y abarcadoras transformaciones, ahora asciende a 66, luego de que fuera sumado el Camilo Cienfuegos, a partir de justa y argumentada reclamación de sus residentes.

En el Complejo Deportivo Fe del Valle, constaron la remodelación de las áreas dedicadas a las prácticas de yudo, lucha, boxeo, Gimnasia, el biosaludable y las piscinas, la olímpica y la diseñada para el disfrute de niños y jóvenes. Todo está casi a punto. Solo falta la cerca perimetral y algunos detalles de pintura.

Las máximas autoridades y sus acompañantes, fueron hasta la llamada rotonda de la Fuente. Después de muchos años, el hermoso y concurrido surtidor de agua, ha vuelto a verter líquido, con lo cual refuerza su condición de principal punto de encuentro y confluencia de quienes moran en este Consejo Popular, de La Habana del Este.

La comitiva recorrió las instalaciones del Complejo Comercial, aledaño, el cual con sus múltiples y variados ofrecimientos, hacen de la populosa Fuente Camilo Cienfuegos, uno de los lugares de mayor concurrencia de la localidad, también bajo la égida de los constructores: Tienda, farmacia, librería, mercado, sucursal bancaria, puntos para el reciclaje de materia prima, y las ventas de productos agropecuarios, pan, gas licuado, y los servicios de ETECSA, este último, una oportunidad que antes no tenían los vecinos y ahora le ponen al alcance de la mano.
En el complejo también coexisten trabajadores por cuenta propia (peluquería y barbería, reparación y llenado de fosforeras; venta de flores y artículos religiosos…), quienes asumieron el acicalamiento de los locales que tienen arrendados.
A ellos, el Primer Secretario del Partido en la capital, pidió, junto a los servicios que ofrecen, entregarse también al mantenimiento y el cuidado de los sitios que ocupan. Ganar dinero, sí, dijo, pero al mismo tiempo invertir a favor de la belleza y la espiritualidad.
Las reparaciones que tienen lugar en la pizzería y el mercado ubicado en los bajos del edificio 311, fueron también chequeadas por las autoridades capitalinas. Todas forman parte de un programa que, al decir de Torres Iríbar, incluye edificación y mantenimiento de viviendas, pavimentación de calles y avenidas, rescate de paradas, y acciones dirigidas a mejorar el abasto de agua, el alumbrado público, entre otras.
Fue un cumpleaños que brilló asimismo con la reinauguración del Combinado Deportivo Ensueño, de Guanabacoa; y la entrega de seis viviendas, en uno de los edificios levantados en Miraflores, Boyeros, donde confluyen tres comunidades de tránsito (Cerro, Centro Habana y Diez de Octubre), que albergan a decenas de familias, las cuales serán erradicadas con la ciudad que ahora crece en lugar.

Y precisamente en este lugar, donde fuera iniciado, hace dos años, el programa para erradicar todas las comunidades de transito capitalinas, ya fueron terminados otros 109 apartamentos, y beneficiados 69 núcleos familiares, y 261 personas, entre ellas ocho madres jóvenes, con tres o más hijos pequeños.

El ramillete de las buenas noticias de la jornada lo conforman la reapertura de la Galería de Arte Domingo Ravenet, de la Lisa, y la puesta en marcha del Proyecto Local, recreativo, gastronómico, cultural, El Castillito, en Plaza de la Revolución, que ya invita con sus renovados atractivos tradicionales: bares, restaurantes, discotecas, piscina, pizzería, sala de juegos, billar…

Y sin lugar a dudas, lo más significativo –en mi opinión-, no solo por cuánto representa en la atención a las parturientas y los recién nacidos, sino también por la exquisitez y el confort que de ello deriva, está la reparación y reequipamiento de los salones de parto y la unidad de cuidados especiales perinatales, del Hospital Obstétrico-Ginecológico, Manuel González Coro, aspectos resaltados por Torres Iríbar y García Zapata.
Como parte de la visita al centro asistencial, las autoridades capitalinas inauguraron una lavandería, con equipamiento y servicios a la altura de las mejores de su tipo a nivel mundial.

En sus intercambios con el pueblo, trabajadores de los centros, nuevos o beneficiados, y los constructores, entregados al crecimiento o rescate, Torres Iríbar y García Zapata, además de hablar de las razones de Cuba, sus retos u oportunidades, y de la sugerencia aquí o allá, a favor de una mejor atención al pueblo, insistieron en la necesidad de defender la cultura del detalle, esa que no deja espacio a la chapucería, y obliga siempre a más cuando de hacer bien las cosas se trate.
Ver además:
Las autoridades deben recorrer la carretera entre los pueblos de Santa Fe y Minas, en Guanabacoa, y reparar los grandes baches en tramos de la calle en el propio Santa Fe, Bacuranao cerca del punto de control y La Gallega, unidos a salideros de agua que no han sido reparados en meses y ya apenas deja transitar a guaguas y demás vehículos, con el riesgo de accidentes.