A sus 501 años y en medio de una pandemia que mantiene ocupados a sus habitantes, La Habana sigue adelante con la certeza de que más temprano que tarde la COVID-19 será el amargo recuerdo de los duros momentos vividos.
La capital de todos los cubanos vive por estos días un intenso ajetreo con la realización de una intervención sanitaria esperanzadora en varios de sus municipios, con la aplicación del candidato vacunal Abdala en primera y segunda dosis, según sea el territorio que haya comenzado primero o después con este proceso.
Y dentro de unos días, otros se sumarán con la aplicación de Soberana 02, para ir desterrando las difíciles vivencias que aún nos provoca un potente virus, ante el cual el pedido sigue siendo a tomar todas las medidas de precaución.
Aunque es cierto que algunos han descuidado su protección, como lo demuestran cifras e imágenes publicadas en las propias páginas de Tribuna de La Habana, otros siguen al pie de la letra cada recomendación de especialistas, científicos y autoridades en esta batalla por la vida.
Sumidos en su cotidianidad, los habaneros siguen adelante aportando desde su espacio al desarrollo de esta ciudad y el país, mientras otros permanecen en la primera línea de enfrentamiento a la pandemia, todos con las ansias de poder volver a caminar sin temores por sus calles y seguir contemplando la belleza que envuelve a la ciudad de las columnas, como la llamara el reconocido escritor cubano, Alejo Carpentier.
Mientras ese momento llega, compartimos con los lectores imágenes de la vida de los habaneros y algunos de sus espacios.
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