Desde la creación de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) sus fuerzas han sido jóvenes con altos principios y valores humanos, sencillos y con una excelente preparación. La cantera de nuestra fuerza policial es el pueblo y a él defiende y garantiza seguridad. Irrita cómo la Policía en distintas partes del mundo, sin contemplaciones, golpea con bastones a los ciudadanos, incluso a menores, les dispara balas de goma directa a los ojos, lanza chorros de agua a presión, gas lacrimógeno y los atropellan con carros de patrulla.

Cuenta el habanero octogenario Evarián Casamayor Rique que antes de 1959 la policía de Batista recorría las calles de la capital y donde veía dos personas conversando decía que más de uno era un grupo y que en la calle no se admitían grupos. Aclara que eso significaba que tenían que irse a casa porque si los veían de nuevo no se sabía cómo acabaría la situación.

En la Cuba de hoy, quienes desacatan la ley y mantienen una pésima conducta social, si agreden a policías en el cumplimiento de su deber, tendrán que recibir la respuesta adecuada, máxime si el oficial trata de preservar su vida. Jamás nuestras fuerzas policiales han masacrado ni atropellado al ciudadano, todo lo contrario, en sus manos está su seguridad. Fiel defensora del pueblo.

En el combate frente a la pandemia, velan por el cumplimiento de la ley ciudadana, el orden y también contribuyen a que se acaten las medidas sanitarias en tiendas y establecimientos públicos. Ejemplo de ello es la Primer Teniente de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), Idalmys Amelia Carmona Anias , quien hace diez meses, desde que comenzó la pandemia, cumple con la sagrada misión de preservar el orden interior y la tranquilidad ciudadana en el Centro Comercial de Altahabana , perteneciente a la cadena de Tiendas Caribe.

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Estuve hace unos días en el mercado de Cuatro Caminos y gracias a los combatientes de nuestra Policía Nacional Revolucionaria y los jóvenes boinas rojas, su presencia, el orden que mantienen, pude comprar en alrededor de 45 minutos. En este mercado se hacen colas inmensas que le dan la vuelta casi completa a la manzana, pero gracias a ellos que mantienen al margen a coleros, revendedores, elementos antisociales como los que agredieron la tienda en su inauguración, gracias a ellos, podemos comprar con seguridad y tranquilidad en una cola muy larga pero igual de organizada, todo es muy rápido, también porque escanean los CI, ya no pueden volver a comprar los que quisieran revender. Gracias por ayudar al pueblo trabajador en tiempos tan difíciles por la pandemia y económicamente también.