Intensas labores ejecutan varias fuerzas constructoras de La Habana, como parte del programa de desarrollo del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, para resolver problemas de drenaje en municipios céntricos de la ciudad.
Desde el miércoles último quedaron abiertas venas en las calles Zaldo, Arroyo, Manglar e Infanta, de los territorios de Centro Habana, La Habana Vieja, llegando hasta la Bahía de La Habana en un tramo aproximado de un kilómetro y medio.
Las acciones permitirán aliviar el alcantarillado y dranaje que colapsaba ante intensas lluvias.
También dan mantenimiento a tuberías, los obreros de Aguas de La Habana, Recursos Hidráulicos, Comunales, Contingente Raúl Roa y otras entidades.

Luis Antonio Torres Iríbar, Presidente del Consejo de Defensa Provincial, y el Vicepresidente, Reinaldo García Zapata, comprueban la ejecución de los proyectos que se realizan tomando precauciones higiénico sanitarias ante el enfrentamiento a la COVID-19.
Antonio Rodríguez, Presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y Manuel Paneque, Delegado en la capital, explicaron que pese a limitaciones económicas actuales, el Gobierno decidió priorizar estas obras que incluyen ejecutar un sifón en la zona de El Pontón.
Torres Iríbar agradeció el esfuerzo, consagración y entrega demostrados, lo cual es reconocido por vecinos como Caridad Gómez Quesada (Cachita), quien reside hace más de 25 años en la calle Zaldo.

Según Cachita, hay lugares de este sitio donde el agua le llegaba desde tiempos ancestrales a los capitalinos casi por los hombros y emocionada reconoció que los trabajadores, mayormente jóvenes, llegan muy temprano, nunca pierden tiempo, actúan con calidad y no les importa que sea domingo para laborar.
En el consejo popular Pueblo Nuevo, de Centro Habana, también realizan acciones de drenaje para evitar afectaciones a los residentes en los Bajos de Santa Ana. Allí, además, dan mantenimiento a las redes de alcacantarillado mediante labores de deconstrucción.
El sifón (tubería de gran capacida) que insertan en ese último lugar captará altos volúmenes de agua del parque de la calle Manglar. Esencial es, además, bajar unos 20 centímetros del pavimento rasante en más de 600 metros lineales.

Una misión muy compleja iniciarán a finales de noviembre venidero y tomará seis meses, aprovechando temporada seca, al profundizar la fosa de sedimento, la cual permitirá que fluya el vertimento a la Bahía por la parte ubicada frente a la Empresa de Servicios Varios del Ministerio de la Industria Alimenticia.
En intercambio con especialistas, obreros y vecinos, tanto Torres Iríbar como Antonio Rodríguez, agradecieron el apoyo de la máxima dirección del país para esta compleja obra que abarca tres municipios, beneficiará a más de 16 mil habitantes y tiene un costo superior a los 10 millones de pesos.
Destacaron que estas labores tienen lugar de forma intensa en medio del duro enfrentamiento a la pandemia y a pesar del recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, como muestra del interés de solucionar problemas que provocan inundaciones que ponen el riesgo vidas humanas, y con las cuales el pueblo y el Estado también pierden importantes recursos.
(Espere más detalles en edición impresa de Tribuna de La Habana)