Fue para muchos la noche más larga, la más oscura. Desde temprano en la tarde andaban los habaneros caminando más a prisa, alertas por los avisos emitidos sobre una posible, y fuerte, tormenta local. Pero a estos cubanos no hay viento que los amedrente.

¿Cuántos ciclones, granizadas o penetraciones costeras no se nos han venido encima? ¿De cuántos eventos meteorológicos hemos salido victoriosos sin lamentar pérdidas humanas y contando muy pocos materiales?

Nadie imaginó entonces que una manga de viento (o rabo de nube como en el campo se les dice) irrumpiría en nuestro escenario, cruzando la ciudad en pocos minutos y dejando en el mapa habanero una huella similar a la de un dedo impertinente tratando de borrar letras de un libro. Diez de Octubre, San Miguel del Padrón, Regla y Guanabacoa fueron los municipios más afectados.

Como un rugir de motores, como cientos de leones hambrientos o como la furia toda de la naturaleza declarando en un grito su indignación, describieron algunos lo escuchado durante la noche cuando las luces de la mañana descubrieron el manto de la incertidumbre y dejaron descubiertas las evidencias del desastre. Cuantificables unas y otras indecibles, las pérdidas no pudieron paralizar los ánimos, ni anquilosar las fuerzas que hicieron emerger una Habana más combativa, enérgica y solidaria; que en solo meses, como los datos señalan, superó los desmanes del caprichoso tornado y pudo celebrar orgullosa su 500 cumpleaños.

Este 27 de enero de 2020, a un año de lo acontecido, seguramente muchas familias de esta capital celebrarán segundos nacimientos: los suyos propios y el de una ciudad que demostró una vez más, como moderna Ave Fénix, saber resurgir de sus escombros.













Solo en un país, con un gobierno como el que tenemos. Revolucionario, por y para el pueblo, es posible que se haga una recuperación en tan solo un año. Tomando en cuenta la gravedad del desastre, y que nuestro país está con el bloqueo de lo más aberrante y genocida de la historia. Estoy orgullosa de ser cubana, vivir en Cuba y tener una Revolucion. No más bloqueos genocidas a ningún pueblo del mundo. Cada pueblo tiene el derecho a elegir como quiere vivir y que sistema político prefiere. Viva Cuba libre y soberana.