Este lunes –ya se hizo el precedente-, los habitantes del municipio de Playa escucharemos durante el amanecer y también en el horario de la tarde- noche, el sonido característico del carro de gran porte que, como en otras ocasiones, recorre las calles de la localidad esparciendo fumigación.

Abrir de par en par nuestras puertas y ventanas para dejar entrar el humo es lo que se precisa. Con esa acción aparentemente sencilla, estaremos acompañando el esfuerzo del Gobierno, que aun en medio de la actual coyuntura, no desatiende el cuidado de la salud del pueblo. 

Al igual que en los restantes municipios de la capital, el territorio dispone de todos los recursos para llevar adelante la estrategia intensiva, en aras de controlar el mosquito Aedes aegypti. Pero la prioridad concedida a que no falte el combustible para este propósito, demanda una respuesta más consciente, responsable y activa de la población, que no contribuye como se necesita al combate contra el dañino vector pues sigue faltándole percepción del riesgo. 

De acuerdo con la doctora Adelina María García De león, directora municipal de Salud en el territorio, es un imperativo cooperar con disciplina y de forma organizada, y comprender la necesidad de cumplir las orientaciones de las autoridades sanitarias. 

 “No se puede hacer nada si el pueblo no está junto a nosotros”, aseveró, tras considerar que la población de Playa, e incluso a nivel de país, no ha entendido el riesgo que se corre en los actuales momentos. 

“Hoy tenemos experiencia en materia sanitaria con relación al enfrentamiento y a la manera integral de intervenir contra el vector. La que falta es que nuestro pueblo, una vez más, se sume, y nos permita la entrada a la casa para hacer las acciones;  identifique a los enfermos y los conduzca para que puedan ser atendidos, haga el autofocal individual, deje la casa cerrada 45 minutos después de la fumigación en el interior de los hogares, y abra las viviendas cuando tiene lugar la extradomiciliaria. 

Foto: Norma Ferrás Pérez

Por su parte, la doctora Marta Sanchidrián Sena, directora del policlínico 26 de julio –calle 72 entre 13 y 15, en Playa-, dijo que con acciones diferenciadas tratan las manzanas identificadas como de riesgo, ya sea biológico por la existencia de enfermos; o con condiciones medioambientales desfavorables, o un nivel de infestación alta del vector. 

Esta institución cuenta con 24 consultorios y tiene la responsabilidad de atender a 22 750 habitantes radicados en 4.5 kilómetros cuadrados. 

“Para impulsar la fumigación de las calles del municipio, nos apoyamos en un mapa que traza la ruta de los carros, de manera que permita establecer una columna de humo que baja poco y va penetrando lentamente dentro de las viviendas”, explicó Sanchidrián, quien más adelante, y con palabras similares, llamó a los playenses a ser celosos guardianes de sus vida.