No es una opción, sino un imperativo: en el sector estatal no se puede usar energía eléctrica durante el horario pico diurno, de 11:00 a.m. a 1:00 p.m., y el nocturno, entre 6:00 p.m. y 10:00 p.m.
Verificar que se cumpla constituye hoy la principal tarea de la Empresa Eléctrica de La Habana, para lo cual un cuerpo de inspectores ya se ha volcado masivamente a la realización de visitas sorpresivas.
Así lo confirmó el director de Inversiones de la entidad, Ingeniero José Antonio García Leyva, quien llamó a apagar todo lo posible y aplicar medidas de ahorro, igualmente válido para el sector residencial, a favor de reducir la participación del diesel en la generación.
Mantener desconectados todos los equipos durante ese tiempo favorece disminuir de manera brusca los consumos, como ha indicado la máxima dirección del país. “Y nadie queda exento de su cumplimiento”, advirtió, tras señalar que no significa privar de electricidad a centros con servicios vitales o producciones importantes; sin embargo, sí deben analizar las posibles alternativas para concretar ahorros como el resto de los clientes, y la población en general.
Puso de ejemplo una sala de terapia de una institución hospitalaria precisada del servicio, pero las áreas de oficina y otras administrativas deben tener la totalidad de las cargas desconectadas y sin usar el aire acondicionado.
Sobre el impacto del cero consumo durante los picos establecidos, García Leyva explicó: “Ambos momentos suponen echar a andar máquinas de generación adicionales; por tanto evitarlo propicia no gastar el poco combustible que disponemos, y poder usarlo más eficientemente”.
Lo orientado es que cada organismo haga su auto lectura a las 5:00 p.m., y la envíe a la Empresa Eléctrica donde se procesará la información y se enviará diariamente bien temprano a los Gobiernos.
“Quienes no se ajusten a su plan diario de energía deberán rendir cuenta antes los consejos energéticos municipales y se adoptarán las acciones pertinentes. La medida por parte nuestra es el corte eléctrico a las oficinas de los directivos de esos lugares”, puntualizó García Leyva.
La Habana tiene 20 527 clientes estatales, de ellos 8 509 son mayores consumidores, con una demanda controlada superior a los 50 kiloWatt. En 1 555 recae más del 85 % del consumo del sector estatal, en lo cual figuran los centros del Polo Científico, hoteles, grandes fábricas e industrias, universidades, entre otros.
“Ahorrar es la forma de no tener que apagar a la población, o al menos reducirlo al máximo, pero eso se logra con la disciplina que exige el momento, para enfrentar la actual coyuntura energética”, concluyó.
Urge q los inpectores y organismos encargados tomen las acciones pertinentes aqui en el reparto Veracruz ,San Miguel del Padron hace 10 dias hay un parque ambulante q funciona a todo dar musica incluida y consumo electrico como si no estuvieramos atravesando una coyuntura dificil y compleja que nos involucra a todos.Quien regula el montaje de estos parques cuenta propia con alto consumo energia y conectados al alumbrado publico