El futuro de un país comienza en la preparación de sus nuevas generaciones. De la alegría que emana en el espíritu joven, de la necesidad imperiosa de cambiar, buscar, de experimentar, así se renueva el alma de cada sociedad.
Cual colofón de su etapa estudiantil se celebró la graduación de los jóvenes de la Universidad Tecnológica de La Habana, José Antonio Echevarria, Cujae, en la cual estuvieron presentes Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Partido en la capital y Reinaldo García Zapata, presidente del Gobierno en La Habana.
Dedicada especialmente al aniversario 55 de dicha Ciudad Universitaria y al 500 de la fundación de La Habana, 1 118 muchachos obtuvieron sus diplomas y distinciones.
Música, confesiones, videos y emoción colmaron el escenario y las gradas del Teatro Karl Marx. Profesores y pupilos, junto a los familiares compartieron el instante en el que los sueños comienzan a forjar la realidad. Presentes estaban los Ingenieros, arquitectos…, profesionales que necesita Cuba para continuar la obra de la revolución.
La solidaridad que caracteriza a nuestra Isla una vez más dio sus frutos a manos de uno de los estudiantes extranjeros que se graduaron. Miguel Dragao Txamonalunga Costa de la Facultad de Ingeniería Eléctrica hablo de la maravillosa oportunidad que representa para él y sus compañeros llevar el nombre de la enseñanza universitaria cubana a sus países o adonde los necesiten.
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