Conferir sentido al pensamiento de la notable científica cubana Rosa Elena Simeón, sintetizado en la frase: “Un residual no es más que una materia prima mal dispuesta”, se ha convertido en una de las premisas fundamentales de la Cooperativa No Agropecuaria (CNA) Atres.

Este grupo de trabajo perteneciente a la forma de gestión no estatal, desde hace poco más de un año, ha añadido a sus servicios la transformación de plástico desechado en ecomadera, un material cuyas propiedades le permiten ser utilizado para las mismas funciones que la madera.

Alejandro Ramos Guerra y Ángel Rodríguez Martínez, responsables de marketing y comunicación de esta CNA, comentaron sobre tal iniciativa ecológica, sostenible y sustentable. Con esta alternativa pueden construirse todo tipo de mobiliarios con mucha más resistencia y durabilidad, entre las que se encuentran pasarelas, butacas, cestos de basura, y todo aquello que hasta ahora era solo posible producir en madera.

Alejandro Ramos Guerra y Ángel Rodríguez Martínez, responsables de marketing y comunicación de Atres Foto: Claudia Pis Guirola

Su principal materia prima, el plástico descartado por consumo, es la misma que hoy contamina casi todos los escenarios ambientales de Cuba. Los especialistas en comunicación afirman: “con nuestra obra tratamos de reducir su impacto negativo en la naturaleza y a su vez contribuimos a la construcción de productos útiles y duraderos.

Según Ramos y Rodríguez, la disminución de vertederos y grandes acumulaciones de plástico pudiera identificarse como el impacto fundamental de esta iniciativa. Además, la ecomadera, como material, brinda atrayentes bondades: es cinco veces más resistente que la madera en condiciones hostiles como la exposición extrema al sol, al salitre y agentes químicos.

Aparte de toda la línea de mobiliario, Atres produce (utilizando la ecomadera), pérgolas, pasarelas, y otras instalaciones para ser insertadas en espacios abiertos y en piscinas, pero siempre con un marcado enfoque medioambientalista.

Ecomadera es amigable y respetuoso con el Medio Almbiente, ideal para espacios naturales Foto: Tomada de Redes Sociales

Actualmente, sus principales proyecciones incluyen el perfeccionamiento en la factura de la ecomadera sin descuidar sus otras líneas de producción y lograr el aprovechamiento de otros residuales con muy poco uso en Cuba luego de su vida útil como es el caucho presente en gomas y neumáticos, con lo cual pudieran fabricarse pisos para parques, zonas urbanas y también tapiar sonoramente habitaciones.

Otro material en la mira de Atres para su reutilización es el tetra pac, alto agente contaminante utilizado en la fabricación de cajas para comercializar jugos, leches y otros productos. De su reutilización pueden salir soluciones muy prácticas para cubiertas de viviendas y la elaboración de falso techos, aseguraron los representantes de la CNA.

Foto: Claudia Pis Guirola

Sin embargo, para todos estos acometidos es necesario contar con la tecnología adecuada y su aplicación está sujeta a investigaciones y estudios que el equipo de Atres, integrado por ingenieros, mecánicos, herreros, químicos y carpinteros, se encuentra desarrollando. Una experiencia de trabajo durante cinco años con materiales convencionales les ha dotado de la capacidad para repensar y evolucionar en su propuesta, algo que se encuentra entre sus principales aspiraciones: siempre continuar avanzando.

En países de la región como México y Colombia existen experiencias similares en la producción de ecomadera y sus resultados auguran un sólido futuro para esta propuesta de Atres, que persigue la meta de solidificar la marca ecomadera en el mercado nacional.

Ecomadera parece ofrecer, entonces, soluciones en dos grandes dimensiones: la económica y la medioambiental. Sus miembros pretenden demostrar que esta conjugación puede manifestarse en un presente perfecto.