Secretos e intimidades de la arquitectura habanera, espacios diseñados y realizados por adolescentes, temas internacionales y lo mejor de la música cubana. Esos son, entre muchos otros, los regalos que a través del éter hace a sus seguidores la emisora Habana Radio, de la Oficina del Historiador de la Ciudad.
En un encuentro con la prensa para celebrar sus primeros 20 años, en el Palacio del Segundo Cabo, el doctor Eusebio Leal, historiador de La Habana, se refirió a la importancia que le concede a la radio y a la imaginación.
“Hoy estamos ante un acontecimiento tan importante para nosotros, el empleo de un medio eficaz para divulgar una idea: el patrimonio cultural como un elemento esencial de la formación integral de todas las generaciones, cómo es importante participar a través de una programación seria, bien meditadas, que elude la vulgaridad, elude lo fácil y entra de lleno, sin volverse en un discurso elitista, a llenar un vacío o una necesidad potente del espíritu de lo que escucha”, así describió Leal a la emisora.

Así abrió Habana Radio su perfil y pasó de ser una emisora de carácter estrictamente local a una emisora nacional, de entrar al sistema de la radio y televisión cubanas (ICRT, Instituto Cubano de Radio y Televisión), pero que tiene el privilegio de diseñar, realizar y llevar adelante, de acuerdo a lo que fue aprobado en su momento, directamente por nuestro querido e inolvidable compañero Fidel, dijo Leal.
Según destacó, la emisora se fundó un 28 de enero, no por casualidad, sino para volcar en ella la vocación martiana y cubana de la Oficina del Historiador. “Una emisora para tocar a las puertas y al corazón de la gente del territorio Patrimonio de la Humanidad, La Habana, y posteriormente llegó a los radioescuchas en todo el país, especialmente a las ciudades patrimoniales que conforman una red, la programación ha abierto su espacio a las Academia Cubana de la Lengua y de la Historia, ha abierto su programación a quienes tienen capacidad disminuida, como los sordos e hipoacúsicos, ha abierto espacios complementarios y ha sido un lugar de forja de periodistas capaces de implementar el discurso que va más allá de mover piedras y buscar papeles, porque es un proyecto integral que toma la restauración como obra social, si no tiene un contenido social”, destacó el historiador.
Singularidad de un proyecto
Magda Resik, directora de Habana Radio, destacó que este es un espacio para la comunicación del patrimonio que incluye no solo el lenguaje radial o del éter, sino el multimedial, es una especie concentrador de la vocación comunicadora de la Oficina del Historiador e inserta la producción audiovisual, discográfica, el acceso a las redes sociales e Internet y también proyectos culturales que se comunican directamente con grupos poblacionales vulnerables como la comunidad sorda y la adolescente.
“Es una gran voz para la OHH y de la Red de oficinas del historiador y el conservador que preside el doctor Eusebio Leal, en función de promover los mejores valores culturales, patrimoniales, históricos e identitarios de Cuba”.
En el encuentro, la cantante Ivette Cepeda, agradeció a la Oficina del Historiador la acogida brindada cuando apenas iniciaba sus pasos en el arte y dio a conocer la materialización de un viejo deseo: la celebración de un concierto, el 28 de enero, a las seis de la tarde, en la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís.
Cepeda consideró a Habana Radio es “el lugar donde se expresa del gozo de la vida en La Habana y en Cuba, el gozo del músico, el que se transmite a través de la cultura y lo bello que está encerrado en todas las canciones”.
Durante el encuentro, se explicaron las esencias y actividades a propósito de los 20 años de la emisora de proyectos culturales que tienen casa en Habana Radio, como Cultura entre las manos, dedicado a las personas sordas e hipoacúsicas mediante la interpretación del lenguaje de señas cubano, del Centro a + espacios adolescentes.