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De Mercedes Iznaga, vecina de calle 3ra. A, No. 4401 entre 44 y 46, municipio de Playa, fue la queja En espera de alguna solución inmediata, donde explicaba que “en la cocina del Instituto Nacional de Reserva Estatal –INRE– se ha creado un vertedero de agua albañales que impacta directamente a mi cuarto”.

Al respecto, el contralmirante Luis Ramón González Navarro, presidente de la mencionada institución, explica: “(…) El inmueble es una vivienda Medio Básico del Instituto…, según la Resolución 305 de 1990 de fecha 8 de abril de 1991 de la directora de administración de viviendas del extinto Instituto Nacional de la Vivienda, ingeniera Norma Porras Reyes, en la cual reside la arrendataria Mercedes Iznaga Jay. El edificio fue adquirido por nuestro instituto con este inmueble incluido, que pertenecía al Ministerio de Educación.

“En la actualidad el edificio donde se ubica el citado inmueble se encuentra en reparación y remodelación de sus locales y sistemas de suministro de electricidad, agua y gas. Para estos trabajos se contrató a la cooperativa Caguayo, por lo que se trabaja en resolver los problemas planteados por la arrendataria, lo cual se puede verificar en su lugar”.

Es bueno señalar que desde la fecha en que se publicó la queja de Mercedes Iznaga Jay (16 de febrero), la respuesta de la institución fue inmediata. En palabras de la propia Mercedes conocimos que: “Le puedo decir que hubo una respuesta rápida en cuanto al tema publicado por parte de los compañeros del Inre. En menos de 72 horas crearon una comisión y llegaron hasta mi vivienda y pudieron verificar todo lo antes expuesto por mí en la publicación, de ahí se derivaron otras cosas de interés.

“Quiero reconocer y darle la gracias al presidente de dicha institución en buscar métodos y soluciones para que no vuelva ocurrir hechos como este, no así al policlínico Ana Betancourt, dígase responsable de la campaña antivectorial o quien le corresponda, que no se personaron para al menos saber sobre el problema. Creo que valió la pena. Gracias por tanta inmediatez”. 

SE DERROCHA LO QUE A OTROS LES FALTA

Elba Ronda, residente en calle 21 entre 50 y 52, municipio de Playa, escribe: “Hace más de diez meses corre por cinco cuadras agua limpia que falta en muchos otros lugares. Desde 29 y 54 se rompió una tubería y un día sí y otro no el agua brota. La delegada se ha preocupado, así como los vecinos, pero hasta ahora no ha habido solución”.